Transportistas de Juárez exigen investigar huachicoleo que genera competencia desleal

El vice presidente en Ciudad Juárez de la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (Canacar), Manuel Sotelo, refirió que el huachicoleo que afecta a transportistas que compran diésel de manera legal afecta a nuestro país tiene un dueño y también tenía un destino, motivo por el cual ahí deberían iniciar las investigaciones.
“No hay que ser un sabio para buscarle una solución a este problema.
Ese combustible salió de un lugar e iba a otro lugar. Dicho combustible tiene dueño y también existe alguien que lo iba a recibir. Creo que ahí debería iniciar la investigación por parte de la autoridad”, señaló Sotelo Suárez en entrevista para El Heraldo de Juárez.
En días pasados, la autoridad federal y la municipal, por separado, aseguraron tractocamiones y pipas con combustible, mismo que los conductores no pudieron acreditar su compra de manera legal.
Tanto los tractocamiones como las pipas pasaron por el puente Zaragoza, de El Paso Texas hacia esta ciudad, atravesando de manera legal y con revisión, se supone, por parte de las autoridades aduanales de este país.
Sotelo Suárez dijo que los sistemas de control por parte de la autoridad aduanal mexicana son demasiado laxos y hacen falta controles más eficientes para evitar este tipo de situaciones que caen en la ilegalidad.
El líder de Canacar expuso que este tema del combustible ilegal ha sido un problema constante que le ha tocado enfrentar a los dos últimos gobiernos federales, tanto el de Andrés Manuel López Obrador como el de Claudia Sheinbaum, y que si este problema persiste es porque hay personas que se dedican a alentarlo.
Dijo que, al menos en este caso, fue posible ubicar los tractocamiones y las pipas y pudieron ser detenidas. Sin embargo, no hay datos comprobables de cuántas cargas más hayan pasado en fechas atrás y si esto ha sido periódicamente o solo es algo esporádico.
“Es lamentable que esto pase entre los dos países. Ignoro por completo a dónde va a parar este combustible, pero si hay verdadera voluntad por atacar el problema solo es cuestión de que se cheque la papelería de dónde salió el producto y a dónde iba a llegar. Ese es el principio para resolver este delito”, concluyó Sotelo.