InternacionalÚltimas noticias

Esto está haciendo España para combatir la escasez de operadores y le está dando resultados

Así como pasa en México, la escasez de operadores de autotransporte en España es un grave problema que amenaza la estabilidad y continuidad de la movilidad y las cadenas de suministro.

El último informe de la IRU reveló que la escasez de conductores de camiones, autobuses y autocares se está saliendo de control en Europa, impulsada por el aumento de la demanda de transporte y el envejecimiento de la población de conductores.

Para Ramón Valdivia, vicepresidente ejecutivo de la Asociación de Transporte Internacional por Carretera (ASTIC) y miembro ejecutivo presidencial de la IRU, eso es solo la punta del iceberg.

Más del 70% de los operadores en España tienen más de 50 años, mientras que la edad promedio de los conductores de autobús es de 49 años.

“Si las tendencias actuales no cambian drásticamente en los próximos cinco años, corremos el riesgo de perder un tercio de nuestra fuerza laboral total en los próximos años”, señala Valdivia.

En declaraciones a IRU, Valdivia señaló que menos del 3% de los conductores de autobús en España tienen menos de 25 años, mientras que la tasa de paro juvenil supera el 30%, la más alta de la Unión Europea.

“En mi opinión, es un indicador muy fuerte de que las generaciones más jóvenes no tienen el mismo interés en la profesión que antes. Revertir esta situación no es fácil. Tomará al menos una generación, pero no podemos rendirnos”.

¿Qué ha hecho España para combatir la escasez de operadores?

En 2020, tras una intensa labor de cabildeo y colaboración con el Ministerio de Transportes, España redujo la edad mínima para conducir de 21 a 18 años para los operadores de carga, y de 22 y 21 para los de autobús.

El objetivo es que la profesión sea más atractiva para las generaciones más jóvenes llevará tiempo. Sin embargo, no es suficiente.

Por ello, el gobierno español también aprobó una nueva legislación que prohíbe la práctica de los conductores de cargar y descargar camiones de más de 7,5 toneladas.

La legislación también compensa, y con razón, a los operadores de transporte cuyos conductores tienen que esperar más de una hora en los centros de distribución.

¿Qué más se debe hacer?

Para Valdivia, otra solución podría ser la contratación de conductores profesionales de terceros países para cubrir parte del vacío.

Para ello, el gobierno debería eliminar las barreras burocráticas que están dificultando el proceso de contratación de conductores profesionales extranjeros de América Latina o Marruecos.

“Deberían permitir a los conductores de terceros países obtener un permiso de residencia permanente de forma fácil y rápida. La convalidación y reconocimiento de sus permisos de conducción también debe abordarse lo antes posible” indica Valdivia.

Además, se está evaluando el proceso de obtención del permiso de conducir a través del sistema educativo reglado.

Una gran barrera para acceder a la profesión es el alto costo de obtener una licencia profesional y recibir capacitación. Esto solo es posible en colegios privados, con un costo de unos 5.000 euros (casi 100 mil pesos).