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Cómo escoger las llantas para tu auto

Si tienes un auto, tarde o temprano necesitarás comprar llantas. Es uno de los elementos de desgaste más frecuentes, y a diferencia de otros, dan lugar a múltiples elecciones posibles. De hecho, hay un gigantesco mercado de llantas con decenas de marcas que compiten entre ellas por precio y calidad, y los consumidores debemos conocer ciertos aspectos para saber qué llantas comprar cuando tengamos que sustituirlas.

Que no se te olvide nunca que entre la carretera y tu coche lo único qué hay son las llantas, su calidad es crucial para una experiencia de conducción óptima, o posibles problemas de adherencia y comportamiento. Tristemente, una parte importante de los consumidores suele fijarse sólo en el precio, y en realidad hay que tener en cuenta muchos otros factores.

Lo primero que debes comprobar es que seaa llantas compatibles. Para ello comprueba las medidas de la llanta revisando el costado, que es donde puedes encontrar su ancho –y ancho nominal-, el índice de carga y el índice de velocidad. Conociendo estos datos ya sabrás cuáles sirven a tu vehículo, pero cumpliendo con estas condiciones vas a encontrar multitud de opciones.

¿Qué uso darás a las llantas?

Entre los varios factores a tener en cuenta, hay uno especialmente importante para saber qué neumáticos comprar: el uso que vayas a darle al vehículo. Si va a ser principalmente por ciudad, lo más recomendable es prestar atención a la distancia de frenado, vida útil y el ahorro de combustible. Es decir, presta atención a que la distancia de frenado sobre seco mojado sea la mínima posible, y que sean de baja resistencia a la rodadura así como de gran duración.

La cosa cambia si el uso va a darse principalmente en autopista o carretera, puesto que la velocidad superior y por tanto necesitaremos pensar en confort y adherencia, así como estabilidad. Si este será tu uso, te recomendamos que busques de nuevo neumáticos con mínima distancia de frenado en mojado y especialmente para alta velocidad, que reduzcan ruido y vibraciones, y que por otro lado garanticen un nivel de adherencia alto.

Y evidentemente, en un uso deportivo la cosa cambia por completo. Aquí la máxima prioridad es que ofrezcan la máxima adherencia tanto en seco como en mojado, y que sus prestaciones estén enfocadas a la estabilidad y precisión.

Fuente Tste coche 

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