Trump consiente a los transportistas en evento
Después de varios días caracterizados por los roces con su secretario de Estado y un senador republicano, el presidente Donald Trump intenta volver a concentrarse en su gran prioridad legislativa del momento, aprovechando un acto en Pennsylvania para promover su reforma fiscal como una bendición para los choferes de camiones.
Trump prevé hablar en Harrisburg contra un trasfondo de enormes semirremolques, ante un auditorio en el que habrá muchos choferes, de acuerdo con la Casa Blanca. Es la nueva etapa de una gira por el país para promover un plan que reduciría las tasas de impuestos empresarios del 35% al 20%, reduciría el número de categorías para el impuesto sobre los ingresos personales y aumentaría la deducción estándar.
Trump dirá que su reforma impositiva beneficiará a los camioneros al reducir sus tasas impositivas, impulsar la manufactura y facilitar la transmisión de los negocios familiares a los niños.
“Cuando sus camiones están rodando, Estados Unidos está creciendo, Por eso mi gobierno está tomando medidas históricas para eliminar las barreras que los demoran a ustedes”, dijo Trump en pasajes distribuidos por la Casa Blanca. “Estados Unidos primero significa dar prioridad a los camioneros estadounidenses”.
Trump se ha sumergido nuevamente en la lucha por los impuestos después de varias semanas en las que debió dedicar atención a una serie de crisis _la masacre en Las Vegas y la recuperación de Puerto Rico devastado por un huracán_ así como a varios dramas generados por él mismo, tales como los enfrentamientos públicos con el senador republicano Bob Corker y el secretario de Estado Tillerson.
Ante la inminencia del año electoral 2018, la reforma fiscal es la máxima prioridad legislativa para un Partido Republicano ávido por mostrar algún logro como partido que domina la presidencia y las dos cámaras del Congreso.