Transportistas tendrán un complicado cierre de 2017: Conatram
El presidente regional de la Confederación Nacional de Transportistas Mexicanos (CONATRAM), Francisco Javier Borrego, declaró que este sector enfrentará condiciones muy complicadas dado que desde el inicio del presente año sus gastos operativos se elevaron por arriba de un 15 por ciento y sus márgenes de ganancia disminuyeron por más de un 10, con lo que su balanza queda negativa y con muy poca oportunidad de poder hacer frente a sus compromiso y los imposibilita para contemplar una renovación de sus unidades.
Desde el primer día del 2017 los combustibles sufrieron un incremento cercano al 20 por ciento, representando a la vez un aumento de un 25 por ciento en los insumos para el sector del autotransporte. Condición que dentro del análisis de Borrego Adame, no se ha podido superar ocasionando que en los primeros seis meses de este año algunos socios de esta organización hayan tomado la decisión de abandonar su actividad dado que dejó de serles rentable.
Precisó que el incremento que se presentó ocasionó el conocido efecto cascada, es decir, al aumentar los precios de los combustibles, muchos de los derivados a su vez lo hicieron, seguido por los productos en general, dado que estos son necesarios para la distribución y tienen una aplicación práctica en la vida diaria de la población en general.
De esta manera los aumentos en aceites, llantas y demás productos ligados como insumos para el autotransporte, ocasionaron que sus ganancias disminuyeran de manera sensible porque esta diferencia en contra no se cubre con las liquidaciones de los viajes o fletes que realizan.
Explicó que las grandes compañías son las principales clientes de los transportistas de mediana calada, y de algunos que tienen de dos a cinco unidades, les han estado imponiendo liquidaciones por los fletes muy por debajo del incremento que sufrieron sus costos operativos, tan solo llegando a un 87 por ciento en los casos más buenos, y en los más negativos no pasa del cinco, condición que ha llevado a muchos propietarios de camiones a considerar abandonar la actividad, o resistir la presión y gastar las pocas utilidades en subsistir, con lo que se vuelve imposible el darles mantenimiento a los camiones y ni pensar en la posibilidad de una renovación de unidades.
Comentó que actualmente en la delegación que le corresponde, que comprende los estados de Coahuila y Durango, se llegan casi a los 5,500 miembros o socios, de los cuales lamentablemente cuando menos 30 ya desistieron de seguir con sus actividades dado que dejaron de ser rentables por las difíciles condiciones que enfrentan.
Finalizó diciendo que ante este escenario los únicos que han seguido teniendo ganancias son las grandes líneas de camiones, dado pueden ofrecer mejores precios a las empresas porque el impacto de los incrementos se diluye al aumentar su número de viajes o fletes.
Fuente Siglo de Torreón