Renault y Volvo se unen para desarrollar camiones eléctricos ligeros
La Comisión Europea ha aprobado la creación de una empresa conjunta en la que participarán Renault y Volvo para el desarrollo de camiones ligeros de propulsión eléctrica.
Bruselas considera que, de conformidad con el Reglamento de concentraciones de la Unión Europea (UE), Volvo y Renault pueden trabajar unidas en el desarrollo, producción y venta de vehículos comerciales ligeros. La alianza además prestará servicios logísticos.
Según informa la agencia de noticias Europa Press, en Bruselas consideran que la alianza entre Volvo Business Services International AB, con sede en Suecia, y Renault SAS, con sede en Francia no supondrá un problema de competencia “dada la limitada posición de mercado resultante de la transacción propuesta”.
Volvo y Renault fabricarán vehículos comerciales ligeros eléctricos
Fue el pasado mes de octubre cuando Volvo y Renault anunciaron su intención de colaborar en materia de movilidad eléctrica. Dijeron entonces que “el nacimiento de esta empresa se debe a la creciente necesidad de una logística descarbonizada y eficiente“. Queda por ver si finalmente entrará en la alianza la empresa francesa CM CGM que el pasado año aseguró estar interesada pero que prefería esperar a conocer la decisión de la UE.
El siguiente paso de esta joint venture llevará a los dos fabricantes a buscar más inversores y socios con el objetivo de lanzar una gama Software-Defined Vehicle(SDV) totalmente eléctrica. Se espera que la producción comience en 2026.
Ayuda para las baterías de Northvolt
Aprobar la unión de Renault y Volvo no es la única decisión en materia de movilidad eléctrica anunciada por Bruselas. La Comisión Europea ha decidido adjudicar una ayuda de 902 millones de euros para la mayor empresa sueca de baterías, Northvolt. El dinero contribuirá a la construcción de la planta de producción de baterías para vehículos eléctricos.
Northvolt se convierte así en la primera empresa que recibe ayuda del nuevo Marco Temporal de Crisis y Transición aprobadas por el Ejecutivo comunitario en marzo de 2023 para contrarrestar el impacto en la economía europea de la Ley para la Reducción de la Inflacción (IRA) estadounidense.
Tal cual está proyectada, la planta tendrá una capacidad de anual de 60 GWH, lo que se traduce en que podrá suministrar baterías para un millón de vehículos eléctricos. Está previsto que la planta empiece a producir en 2026 y alcance su máxima capacidad en 2029.