Uso de auto eléctrico aumentará en la CDMX
En el futuro se espera un predominio de nuevos autos con fuentes energéticas a base de pilas que sean alimentados con energía eléctrica o por celdas de hidrógeno, y con alternativas híbridas que se mantendrán conviviendo con las opciones tradicionales con base en hidrocarburos.
El profesor-investigador de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) Bernardo Navarro Benítez dijo que el transporte y la movilidad deben comprenderse como parte de las condiciones generales de la reproducción social no sólo por los autos sino por las fuentes energéticas, infraestructuras y equipamientos.
Entre las opciones que habrá, destacó la renta de bicicletas para hacer recorridos urbanos acotados y el car sharing, es decir, la renta de vehículos por lapsos cortos.
En el caso de la Ciudad de México se trata de una iniciativa incipiente que intenta sondear las posibilidades y sobre todo las condiciones mercantiles de la servicialización de este tipo de desplazamiento personal urbano, expuso en un comunicado de la UAM.
Comentó que la idea fundamental del car sharing es hacer énfasis en la perspectiva utilitaria e intermodal del uso del automóvil mediante esquemas de renta por plazos cortos sin que exista propiedad del automotor por parte del usuario, consideró el profesor del Departamento de Teoría y Análisis.
La oferta tiene una implementación que privilegia áreas específicas del territorio capitalino y que corresponden a los barrios de clase alta y a las principales universidades privadas, ya que estas empresas sobre todo están interesadas en el mercado de jóvenes económicamente solventes, señaló.
Insistió en que el transporte y la movilidad urbana tienen un papel fundamental en el proceso de reproducción económico-social de las principales ciudades del planeta.
Por eso, añadió, las infraestructuras y sus efectos útiles forman parte de las imprescindibles condiciones generales de la circulación requeridas por el proceso de acumulación del capital para posibilitar la circulación de bienes para la producción, el intercambio y el consumo.
Navarro Benítez anticipó que la potencial servicialización del tránsito individual de personas en las principales ciudades será una expresión particular de la tendencia a combinar el uso de diversos asuntos como el internet de las cosas, la teledetección y la aplicación de sistemas de posicionamiento global para la georreferenciación continua en tiempo real.
Estas combinaciones tecnológicas posibilitarán el desarrollo de otros campos de negocios, en los cuales la disponibilidad de información de los ciudadanos que se mueven será materia prima y producto fundamental para su conversión en mercancías o para su eventual utilidad con objetivos sociales, agregó.