¿Transportas en zonas extremas de frío? Entonces debes de tomar esto en cuenta
Aunque en México gran parte del país es cálido, hay zonas de extremo frío en el norte del país. A medida que las temperaturas comienzan a bajar y se acerca el invierno, los operadores deben tomar medidas para asegurar que sus vehículos estén listos para las difíciles condiciones que se avecinan.
El invierno puede ser duro tanto para los camiones como para operadores, pero con un mantenimiento preventivo y planeación se puede minimizar las averías y mantener su flota funcionando eficientemente.
1. Batería y Salud del Sistema eléctrico
El clima invernal es notorio por drenar las baterías, lo que hace más difícil que los vehículos comiencen. Las temperaturas frías ralentizan las reacciones químicas dentro de la batería, reduciendo su salida. Jeffrey Nichols, un técnico senior de diesel de Fleet Services de Cox Automotive, aconsejo: “Los inicios fríos son más duros con las baterías, y es esencial probarlas antes de que llegue el invierno real”. Realizar pruebas de carga, limpiar terminales y asegurar que los sistemas de carga estén en buen orden de trabajo.
2. Secadoras de aire para frenos
En climas extremos existen secadoras de aire juegan un papel crucial para garantizar la fiabilidad del sistema de frenado de su flota. En el clima frío, la humedad en el sistema de aire puede congelarse y causar disfunciones, lo que conduce a averías potencialmente peligrosas.
“Congelar en el sistema de aire es uno de los fallos invernales más comunes que vemos, dijo Nichols.
Los controles rutinaros, el drenaje de tanques de aire y el mantenimiento de secadores de aire a las normas OEM son esenciales para prevenir los problemas del sistema de aire invernal.
3. Sistema de refrigeración
Una de las tareas de mantenimiento invernal más críticas es asegurar que el sistema de refrigeración esté preparado para las bajas temperaturas. Comprobar los niveles de anticongelante para confirmar la mezcla adecuada de agua a refrigerante, que debería ser 50/50.
Nichols hizo hincapié en comprobar los aditivos de refrigerante diésel (DCA) para obtener niveles adecuados para evitar la corrosión y el desgaste del motor. Además, inspectúe correas y mangueras en busca de desgaste y prueba calentadores de bloque para asegurarse de que están operativos, especialmente en motores diesel.
4. Preparación para conducir
La preparación de manejo en climas fríos va más allá de los aspectos mecánicos de su flota. Los operadores deben estar completamente preparados para las condiciones que podrían enfrentar.
Asegúrese de que los limpia-parabrisas están funcionando, los espejos funcionan, y el depósito de líquido de la arandela está lleno. Además, asegúrese de que el kit de seguridad del vehículo esté completo con mantas de emergencia, ropa de abrigo y otros artículos esenciales.
5. Estrategia de tratamiento de combustible
El combustible es una preocupación importante durante el invierno, especialmente para los vehículos diésel. Fowler dijo que los operadores de flota deben usar combustibles o aditivos mezclados para mantener el combustible fluyendo libremente en condiciones de congelación.
Si tiene una flota en un lugar de clima extremo, asegúrese de que los calentadores de combustible estén operativos y considere las mezclas de combustible específicas de la región si su flota operará en áreas climáticas especialmente frías. Evitar la congelación del combustible es crucial para mantener sus vehículos en la carretera.
6. Condición de neumáticos y presión
El mantenimiento de neumáticos a menudo se pasa por alto en clima frío, pero asegurar que su flota esté lista para las condiciones de las carreteras de invierno es crítico. La presión de los neumáticos disminuye en las temperaturas más frías, lo que puede llevar a una menor tracción y desgaste desigual.
“Vigile la presión de los neumáticos y ajuste a medida que las temperaturas caen para garantizar un viaje de invierno seguro y suave, sugirió Ben Deisig, una alta tecnología diesel con servicios de flota.
El mantenimiento adecuado de los neumáticos ayuda a asegurar que su flota mantenga un control óptimo en las carreteras heladas o cubiertas de nieve, mejorando tanto la seguridad como el rendimiento.