Teleseguridad en el autotransporte la tendencia para evitar robos

Cada vez, por desgracia, es más habitual leer que las cargas de los camiones han sido robadas en las áreas de descanso o bien en donde estaban aparcados mientras el conductor hacía un descanso o parada.

Son muchas, de hecho, las empresas que ya han empezado a apostar por servicios que les avalen una seguridad patrimonial añadida en caso de que sucedan incidentes de este tipo ya que las pérdidas son cuantiosas cuando la mercancía no llega a destino y tienen que hacer frente a la compensación por incumplimiento.

“No se trata solo de contratar seguros que ayuden en caso de robos o accidentes, sino también de dar un paso al frente y dejar de ser un agente pasivo para ser activo en lo que a seguridad se refiere” explican desde el sector.

En este sentido, la instalación de cámaras en los vehículos ha sido clave para que las flotas de empresas que se dedican precisamente al transporte de mercancías puedan disponer de algo que les ayude a defenderse y denunciar en caso de necesidad.

Gracias a soluciones en la que las cámaras almacenan la información en la nube, se consigue precisamente poder dotar a las autoridades competentes de imágenes de alta definición que aclaran lo sucedido sin necesidad de hipótesis, algo que no solo protege la carga, sino también a los conductores y trabajadores. 

Pero, en un paso más, también es capaz de rastrearse la carga gracias a la implantación de rastreadores gps que dan seguimiento a los movimientos de la misma, poniendo en jaque a quien ha decidido delinquir y robarla.

En realidad, cuando una empresa de transporte acepta una carga para llevarla de un punto a otro, hay varios agentes implicados: por un lado, la propia empresa y, por otro lado, la empresa remitente con el coste de su carga y la empresa destinataria con la necesidad de recepción con calidad de los productos.

En ese tránsito, además, se une un agente externo: la aseguradora. Para que ésta se hiciera cargo de cualquier incidente es necesario que se hayan extremado las precauciones al máximo ya que de eso dependerá que las autoridades tramitaran la correspondiente denuncia, iniciaran la investigación y la aseguradora cubriera la incidencia.

En este sentido, cuando la propia empresa transportista apuesta por blindar al máximo la seguridad no solo de sus trabajadores con un rastreo gps – que permite detectar cualquier alarma de que algo no funciona correctamente no solo en el vehículo sino también en la forma de conducción de su empleado – sino también con cámaras capaces de ser testigos fieles de cualquier hecho ajeno que suceda alrededor del vehículo y que comprometa la carga, es cuando las empresas que contratan sus servicios se sienten de verdad protegidas.

“La tecnología cada vez nos facilita más la seguridad y el trabajo y negarlo es ir contracorriente. ¿Por qué no usar las herramientas que facilitan el trabajo y dan tranquilidad tanto a clientes como a nosotros mismos?”