Sector automotriz, clave en renegociación de TLCAN
El sector automotriz será clave en las renegociaciones del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) debido al elevado déficit comercial que Estados Unidos mantiene en este rubro con México, apuntó el banco de inversión Merrill Lynch.
En un informe difundido este lunes, el banco de inversión indicó que el déficit comercial bilateral de Estados Unidos en este sector representa más que todo el déficit comercial total con México, por lo que las negociaciones del TLCAN podrían centrarse en este rubro industrial.
Debido a esta relación comercial, “las negociaciones (del TLCAN) podrían concentrarse en este sector”, destacó el banco con sede en Nueva York.
El año pasado, el déficit bilateral de Estados Unidos con México en el sector automotriz fue de 74 mil millones de dólares, lo que superó el déficit total de 63 mil millones que la economía estadunidense mantiene respecto de la mexicana.
Merrill Lynch puntualizó que desde 1994, año en que iniciara el TLCAN, el déficit en el sector automotriz de Estados Unidos con México ha aumentado constantemente, con un alza particularmente notable en esta década.
Resaltó que la automotriz es la industria más integrada de América del Norte, al mismo tiempo que, desde una perspectiva contable, es la causa principal del déficit comercial regional de Estados Unidos.
Pese a que el desequilibrio en la balanza comercial es una razón por las que el presidente Donald Trump pretende renegociar el TLCAN, Merrill Lynch previó que un nuevo acuerdo tendrá “un impacto menor en los déficit comerciales bilaterales y menos aún en los empleos de la industria manufacturera”.
“México tiene una ventaja comparativa natural en cuanto a fabricación con mano de obra poco calificada. Reducir la diferencia de costos laborales por unos pocos dólares probablemente no tendrá mucho impacto”, de acuerdo con el documento.
Alertó además que imponer restricciones a la inversión automotriz en México no se traducirá en más empleos para estadunidenses, sino en el traslado de estos puestos de trabajo a otros países de bajos salarios y a una acelerada adopción de tecnologías que ahorren mano de obra.
Sin embargo, “si las negociaciones comerciales no reducen el déficit comercial ni devuelven empleos industriales, existe el riesgo de que el gobierno de Trump cumpla sus amenazas e imponga tarifas u otras medidas proteccionistas importantes”, consideró el banco.
En general, Merrill Lynch espera que las negociaciones generen períodos de incertidumbre en los mercados, aunque pronosticó que al final darán como resultado un acuerdo actualizado.
No obstante, precisó que existe el riesgo de que el proceso de negociación sea suspendido y que Estados Unidos recurra a la imposición de aranceles unilaterales, lo que haría a México “particularmente vulnerable a un choque recesivo”.
Fuente El economista