Rechaza Ruiz Esparza irregularidades en OHL
En una carta dirigida a Reforma, el secretario de Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz Esparza, defendió los contratos firmados por el Gobierno del Estado de México con la constructora OHL y la rescisión del contrato con la empresa Infraiber.
El funcionario considera “infundadas y tergiversadoras” las aseveraciones de Paulo Díez Gargari, abogado de Infrabier, sobre la modificación del título de concesión del Circuito Exterior Mexiquense.
La decisión de extender hasta 2015 la duración del título de OHL, indica, se tomó con base a una contraprestación que incluyó la construcción del Museo Torres Bicentenario, una máquina para eliminar barreras y la construcción de diversas vialidades.
“El Museo Torres Bicentenario se construyó con cargo a una contraprestación en especie por parte de un concesionario, autorizada por el organismo público descentralizado SAASCAEM (Sistema de Autopistas, Aeropuertos y Servicios Auxiliares del Estado de México)”, indicó.
“El museo está financiado a través de una concesión del Estado de México que data del 2003, la del Circuito Exterior Mexiquense que, como todas las concesiones otorgadas por el Estado, representa un activo para el gobierno, que puede utilizar como mecanismo para financiar sus requerimientos”.
En lugar de pagar el monto de contraprestación en efectivo, explica, el concesionario entregó la obra terminada, de conformidad con el anteproyecto que se le proporcionó.
El costo con cargo a la contraprestación, apunta, fue de 110 millones de pesos.
“Adicionalmente con cargo a la misma contraprestación, se financiaron obras de gran relevancia como son la conclusión de la vialidad mexiquense (vía paralela a la José López Portillo), la rehabilitación de las carreteras Otzoloapan-Terreros y Chapa de Mota-Nicolás Romero (y) la pavimentación de 40 calles en el municipio de Chalco”, apuntó.
Ruiz Esparza señala, por otra parte, que la rescisión del contrato con Infraiber para efectuar la medición de aforos de las autopistas del Estado de México se basó en una resolución judicial.
“Este convenio le hubiera permitido a Infraiber y a su principal propietario, Pedro Topete, medir los cruces en casetas de todas las autopistas del Estado, cobrando una tarifa excesiva y fuera de mercado de 50 centavos por cruce, a un plazo de 20 años, cuando el costo de este servicio no debería ser superior a 15 centavos por cruce y normalmente se realiza de manera aleatoria y no permanente”, señaló.
Fuente Zócalo