Para Amotac el Traspaso de la Guardia Nacional al Ejército es un capricho de AMLO
Diferentes sectores se mostraron en contra del paso de la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), pues advierten un riesgo de que incrementen las violaciones a los derechos humanos de la población.
Luego de que la Cámara de Diputados avaló la incorporación de la Guardia Nacional a la Sedena, el consejero nacional de la Alianza Mexicana de Organización de Transportistas A.C. (AMOTAC), Raúl Torres Mendoza, señaló que con “el capricho” del Presidente de la República por militarizar a la Guardia Nacional, éste se puede considerar como un sexenio fallido en lo que respecta al combate al robo al transporte de carga en las carreteras.
Y es que lamentó que por parte del Presidente hubo la “terquedad” para que la Guardia Nacional sea conformada sólo por militares, y expulsó de ella a los elementos de la extinta policía federal de caminos, pese a que contaban con capacitación en estrategias para el combate al robo en las carreteras.
Destacó que “no se pueden tener puros militares en la Guardia Nacional cuidando las carreteras porque tienen una formación diferente, son de poca habla, de poco trato, y en las carreteras circula todo tipo de ciudadano, y si no hay un contrapeso se pueden incrementar las violaciones a los derechos humanos de los usuarios de las carreteras y de los transportistas”.
Señaló que además, cuando se han tratado de hacer sugerencias a los militares, no hay apertura, pues debido a su formación están acostumbrados a que los superiores son los que mandan y sólo hacen lo que se les ordena, “están más “cuadrados” que la policía federal, que tenía mayor cercanía con los usuarios de las carreteras”.
Denunció que durante este sexenio que termina, creció alrededor de un 38% el robo de autotransporte de carga en el país, tanto de acero como de electrodomésticos, alimentos y prácticamente todo tipo de mercancías y materiales que se transportan por carretera, además de que hay malos elementos de la Guardia Nacionalque cometen violaciones a los derechos humanos de los usuarios, principalmente en carreteras del sureste del país.
Torres Mendoza indicó que debido a ello, AMOTAC le pedirá a la Presidenta electa la creación de un grupo nacional especializado en combate al robo de autotransporte, de manera que en cada estado se tengan unidades con elementos de la extinta policía federal con vocación de servicio y capacitación en combate al robo en carreteras, para que sea un contrapeso a la Guardia Nacional y disminuya la incidencia delictiva en las carreteras del país.
Por separado, Alberto Narváez Arochi, integrante de la asociación civil Potosinos con Valor, calificó como “una incongruencia total” que a pesar de que se define como partido de izquierda, Morena fomente la militarización del país, pues recordó que los partidos de izquierda están en contra del militarismo.
Manifestó que éste es “uno de los últimos golpes que deja López Obrador en contra no sólo de la ideología que dicen manejar, sino a la democracia y a los derechos humanos”, y es que destacó que con la militarización -que representa obediencia ciega-, lo único que se puede esperar es que incrementen las violaciones a los derechos humanos, aunado a que ya se ha visto en los últimos años, que esta medida no ha ayudado a reducir la incidencia delictiva en el país.
También dijo considerar que ya no hay nada por hacer en la vía legal para detener este paso de mando de la Guardia Nacional a la Sedena, primero porque la administración federal no ha atendido lo que le ha ordenado la Corte, y después, porque el partido en el poder tiene la mayoría calificada tanto en la Cámara de Diputados como en el Senado, “la Corte le ordenó hace años que regresara al Ejército a los cuarteles y le diera el mando a los civiles, pero creo que ese papel si algún uso tuvo fue en el sanitario, fue para encender el boiler, hicieron caso omiso”.
En donde queda algo por hacer, consideró, es en el ámbito civilista, “toca a los ciudadanos resistir, crear órganos de resistencia para que todo esto se conozca, se denuncie, y apuntar la mirada a dentro de tres años para tratar de recuperar un Congreso donde haya oposición, para que un solo grupo no pueda hacer lo que le da la gana”.