La logística de la “Superfarmacia” del Gobierno, el reto mas complicado
El presidente anunció la creación de una megafarmacia en tiempo récord, pero ha entregado el proyecto a Birmex, empresa que contrata a terceros por el servicio de distribución de medicinas.
En un tercer intento por acabar con el desabasto de medicamentos en el país, el presidente Andrés Manuel López Obrador ha ideado un nuevo plan: la creación de una megafarmacia estatal que distribuya insumos médicos a todos los hospitales públicos de México.
La estrategia está en marcha. El gobierno federal pagará 2,000 millones de pesos a Liverpool por los almacenes que mantiene vacíos en el municipio de Huehuetoca, Estado de México.
Ahí operará el Centro Federal de Almacenamiento y Distribución de Insumos para la Salud (Cefedis), nombre oficial de la superfarmacia del Gobierno, que el presidente planea inaugurar antes de que concluya este año.
“En diciembre vamos a inaugurar ya la gran farmacia que va a contar con todos los medicamentos que se requieren, todos los medicamentos”, declaró el 21 de noviembre.
Sin embargo, expertos del sector apuntan que no basta con abrir un almacén. La distribución de medicamentos es una de las logísticas más especializadas, que algunas farmacéuticas han tardado años en implementar, y el Gobierno ha dejado en manos de la paraestatal Birmex (Laboratorio de Biológicos y Reactivos de México).
Aunque esta empresa estatal ya se encarga de la entrega de vacunas y de algunos medicamentos, sigue contratando a terceros privados para la distribución. Esto pone en duda si Birmex realmente podrá operar un proyecto tan ambicioso con sus propios recursos humanos y presupuestales, y si la megafarmacia de López Obrador será una realidad en el corto plazo.
La farmacia más grande del mundo
Durante este sexenio han sido frecuentes las protestas de pacientes por la falta de medicamentos. Desde familias de niños con cáncer, personas que requieren fármacos psiquiátricos y hasta mujeres con cáncer de mama se han manifestado ante el desabasto.
Según López Obrador, la escasez ocurría muchas veces por prácticas irregulares de farmacéuticas y distribuidores. Ordenó sacarlas del mercado y creó el Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), que compraría medicamentos a través de la Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (UNOPS).
Ante las fallas en el modelo, regresó la compra consolidada a la Secretaría de Salud, desapareció el Insabi y anunció que Birmex estaría a cargo de la distribución de los insumos.
Ahora da un paso más con la idea de crear la farmacia “más grande del mundo”. La intención del presidente es que desde este almacén se entreguen los medicamentos en menos de un día, a través de camiones y hasta por vía aérea.
“Esa gran farmacia, ese gran almacén, va a tener un sistema de comunicación y de transporte para que, si falta un medicamento en una comunidad, en un pueblo, en un municipio, en un estado, sea un centro de salud, un hospital, en 24 horas se tenga el medicamento, porque van a estar todos los medicamentos que se utilizan para atender todas las enfermedades”, ha explicado López Obrador.
Para consolidarse como el principal distribuidor de insumos para la salud, Birmex amplió sus operaciones al hacerse cargo de las entregas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), la mayor institución de seguridad social, desde octubre de 2023.
En una entrevista reciente, Zoé Robledo, director general del IMSS, confirmó que la paraestatal sería ya su única distribuidora, dejando fuera a los proveedores privados.
“Birmex es ya nuestro operador logístico en el Seguro Social. Es decir, la distribución de los medicamentos ocurre con Birmex a partir de octubre de este año. Ahora (es) nuestro único distribuidor”, declaró a la revista Expansión.
Para Robledo, esta decisión demostraba que Birmex tiene una gran capacidad de almacenamiento y distribución de fármacos, que incluso podría ampliar a otras instituciones de salud, como IMSS-Bienestar y el ISSSTE a través de la megafarmacia.
El problema es que para cumplir con la distribución a los hospitales del IMSS, Birmex continúa contratando los servicios de operadores logísticos privados.
Birmex y sus capacidades logísticas
Durante 2023, la paraestatal de biológicos ha adjudicado de manera directa al menos cinco contratos por 407.5 millones de pesos para la distribución, recolección, resguardo, almacenamiento y hasta para la planeación y operación de la logística de entrega de medicamentos, material de curación, vacunas y otros insumos de salud.
Los contratos para transportar los fármacos por vía terrestre y aérea, en algunos casos, a hospitales de IMSS-Bienestar en Nayarit y Sonora y entregar vacunas a los 32 estados del país.
Se han adjudicado a las empresas Logística y Transporte para la Industria de la Salud, Médica Farma Arcar, Marken Limited, Pharma Tycsa y Almacenaje y Distribución Avior, según consta en los contratos publicados en la plataforma de compras públicas de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
Birmex ha explicado que recurrió a estas adjudicaciones porque necesitaba realizar el servicio con eficacia y eficiencia a fin de hacer uso racional de sus recursos y evitar “la pérdida de tiempo” y “no afectar la salud pública de los derechohabientes”. En los documentos de la contratación detalla que también requería transportes especializados para la entrega, con control de temperatura, unidad refrigerante y red de frío.
“La distribución de medicamentos no es como entregar papitas y refrescos”, comenta un proveedor gubernamental de estos servicios que prefiere mantener el anonimato por temor a ataques del Gobierno.
Dice que, además, es una clara muestra de que las dependencias de salud no han logrado entregar los medicamentos sin recurrir a las empresas privadas, pese a los intentos de dejarlas de lado porque todavía carecen de los recursos e infraestructura necesarios para distribuir una cantidad inmensa de insumos. Tan sólo en la última compra consolidada, el Gobierno adquirió 2,175 millones de piezas.
Fuente Expansión