Ferroviarias van por la carga de los autotransportistas
Lorenzo Reyes Retana, presidente de la Asociación Mexicana de Ferrocarriles (AMF), explicó que el objetivo para ese lapso es alcanzar una participación de 40 por ciento en el transporte terrestre, desde el 25 por ciento que tienen actualmente.
“Puede representar una muy importante ventaja para la economía mexicana, porque significa trasladar la demanda de transporte de las carreteras, que se pagan con presupuesto federal, a una red que se mantiene principalmente con las inversiones que hacen las propias compañías”, dijo durante su participación en el décimo Encuentro Portuario.
Además de un menor gasto en mantenimiento de la infraestructura carretera, otro de los beneficios sería la reducción de los congestionamientos.
Sin embargo, para que eso suceda, dijo, es necesario mejorar las condiciones de seguridad, pues actualmente los trenes son una víctima constante de robos en varias partes del País.
Asimismo, se requiere resolver el problema de la convivencia entre el ferrocarril y las ciudades. En varias partes del País, como Manzanillo, los trenes interrumpen la vida urbana cada vez que pasan.
De acuerdo con la propia AMF, el tren es más competitivo en distancias mayores a 500 kilómetros.