Carretera del terror. Así desparecen operadores en la Monterrey-Nuevo Laredo
“¿Que sí he visto a compañeros que se han llevado?… pues prefiero no decirte, pero interpreta mi silencio. Uno se encomienda a Dios y no se detiene a ver”, nos indica Óscar, operador de una empresa transportista en la frontera.
Por su labor como conductor de carga, Óscar tiene que recorrer cientos de kilómetros diariamente por la carretera federal 85 Monterrey – Nuevo Laredo, una de las autopistas más peligrosas del país, donde las desapariciones de operadores y automovilistas son una constante.
De acuerdo con cifras de la Subsecretaría de Derechos Humanos, Población y Migración, de diciembre de 2018 a la fecha, en todo México han desaparecido 49,581 personas y solo el 56.54% (28,035 de ellas), ha sido localizada.
Tanto Nuevo León como Tamaulipas son parte de los estados que concentran el mayor número de reportes de personas desaparecidas.
Hasta este 9 de julio, se tiene registro de al menos 71 personas desaparecidas alrededor del Km. 26 de la Monterrey-Nuevo Laredo.
La mayoría de ellas son hombres de entre 18 y 40 años, cuya ocupación es ser conductores de transportes de carga o de personas (tráiler y taxis).
“El hecho de que la mayoría de desaparecidos sean conductores de transporte de carga y servicios de Uber o taxis en general hace pensar que usan los transportes para disimilar sus actividades criminales”, señaló la titular de la Comisión Nacional de Búsqueda, Karla Quintana.
Quintana indicó que existen versiones de que 17 de esas 71 personas fueron liberadas, pero queda pendiente confirmar el dato.
Ante la gravedad del problema, este miércoles iniciaron los trabajos de búsqueda en el kilómetro 26 de la carretera. De hecho, el FBI ha comenzado a realizar sus investigaciones en México, ya que 7 de los desaparecidos son estadounidenses.
Monterrey-Nuevo Laredo, carretera de nadie
La carretera federal 86 Monterrey-Nuevo Laredo abarca 219 kilómetros y es una de las principales autopistas en el norte del país, ya que une a los estados de Nuevo León y Tamaulipas.
El tramo carretero es usado principalmente por operadores de carga, quienes transportan mercancía hacia y desde Estados Unidos.
En tal escenario, la violencia en Nuevo Laredo (asaltos, secuestros y bloqueos en carreteras) se ha intensificado desde 2018, presumiblemente efectuadas por El Cartel Del Noreste, un ‘remake’ del Cártel de los Zetas.
A la par, la Secretaría de Gobernación (SEGOB), consideró que esos hechos son parte de la guerra entre los cárteles del Noreste y Jalisco Nueva Generación.
“Casi diario hay balaceras y enfrentamientos, aquí el crimen está a todo lo que da”, refiere Rubén, operador de carga en la frontera y originario de Nuevo Laredo.
Otro testimonio asegura que la ausencia de curvas en dicha carretera facilita la operación de los delincuentes, quienes le cierran el paso a los operadores para secuestrarlos.
“Lo extraño del caso es que muchas veces no se llevan ni el tráiler ni la carga, sólo al operador”, nos refiere un conductor quien prefirió no ser identificado.
Operador Anónimo
De acuerdo con una investigación de República MX, desde 2016 un grupo de mujeres han denunciado la desaparición de 26 operadores en las carreteras de Nuevo Laredo.
Sin embargo, ninguno era de Tamaulipas, sus cosas estaban intactas y no les robaron el tráiler ni el diésel.
De acuerdo con el testimonio de algunos operadores para esta nota, se tiene identificada la caseta de cobro de Sabinas Hidalgo hasta el entronque a Vallecillo como el área donde más asaltos y secuestros se presentan.
Sabinas Hidalgo es precisamente el lugar donde se perdió el rastro de la estadounidense Glady Pérez y sus dos hijos, quienes fueron vistos por última vez el 13 de junio y lo cual atrajo la investigación del FBI.
Secuestros y desapariciones de operadores, un problema añejo
El robo al transporte de carga se ha incrementado de manera gradual durante los últimos años.
Según datos de la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga, Canacar, el delito aumentó 209% de 2015 a 2019. El 2020 concluyó con 2,912 siniestros.
Sin embargo, el ‘modus operandi’ de los delincuentes ya no se limita únicamente al robo de las unidades y de la mercancía, sino también se ha registrado un alza alarmante de secuestros y asesinatos de operadores.
El reporte anual del robo de carga en México elaborado por la empresa Sensiguard, reveló que en 2019 se registraron 17,503 incidentes, de los cuales casi en el 60% existió privación ilegal de la libertad del conductor.
De acuerdo con la Alianza Mexicana de Organización de Transportistas (Amotac), la violencia, delincuencia y falta de mantenimiento en carreteras federales, ha cobrado la vida de al menos 30 operadores entre 2020 y 2021.
