3 buenas prácticas en el delivery de alimentos
Todos en algún momento del día sentimos la necesidad de satisfacer un antojo. Ya sea dulce o salado, los seres humanos buscamos la forma de cumplir este deseo apremiante en el menor tiempo posible, e idealmente de la manera más eficiente y barata.
Estos son los principales retos a los que deben enfrentarse los negocios del rubro alimenticio que entregan vía delivery, además, por supuesto, de cumplir con la promesa de calidad de la comida la cual puede verse afectada por una mala planificación de la ruta definida para la entrega.
De acuerdo con el más reciente estudio sobre venta online de alimentos y bebidas publicado por la Asociación Mexicana de Ventas Online (AMVO), 5 de cada 10 compradores de alimentos recurren a los canales digitales para satisfacer sus antojos. Esta es una de las principales razones por las cuales compran comida especial (44%).
La pandemia sin duda provocó que este segmento del delivery se acelerara. Los restaurantes y pequeños negocios han tenido que adaptar su packaging, así como su servicio en general, para poder responder a los usuarios que hoy buscan entregas cada vez más rápidas (y que constituyen un 46% de la población sondeada, según datos de AMVO).
A pesar de los avances que han ayudado a consolidar esta industria, aún quedan muchas oportunidades para que el delivery de alimentos siga creciendo. En ellas, la tecnología juega un rol clave.
“El delivery OnDemand, especialmente alimenticio, debe ser de uso sencillo y amable tanto para los usuarios, como para los negocios. El reto no está solo en reducir el tiempo que demoran tanto en cocina como en su preparación para el envío sino también en entregarlo con el mayor cuidado y en el menor tiempo posible”, comenta Álvaro Echeverría, CEO de SimpliRoute, startup que se dedica a la optimización logística inmediata y a demanda.
Para apoyar a los negocios que se dedican a esta industria, y en base a su experiencia, SimpliRoute presenta 3 consejos para mejorar el proceso de última milla logística en el rubro alimenticio:
1. Elevar la experiencia del cliente volviéndola memorable
Una de las principales complicaciones que enfrenta la compra de comida vía delivery es el manejo de los productos. 10% de estos problemas provienen de una logística mal manejada a raíz de la falta de cuidado en el trayecto, que puede traducirse en productos dañados, o bien órdenes incompletas o incorrectas. Garantizar una experiencia memorable de principio a fin, en este sentido, es fundamental para los comercios que esperan mantener su competitividad.
Delimitar los radios donde se puede entregar el servicio, es una vía para lograr una experiencia agradable con el cliente final, ya que de esta forma los alimentos soportarán el tiempo adecuado antes de que se enfríen, desarmen o estropeen.
2. Mejorar los tiempos de entrega
El uso de inteligencia logística a través de modelos matemáticos predictivos e inteligencia artificial permite predecir el tiempo de entrega de los pedidos y mejorar los tiempos estimados y la experiencia del cliente final. Con el uso de este tipo de tecnologías que gestionan la logística de última milla inmediata y a demanda, es posible alcanzar una tasa de 83% de entregas anticipadas respecto a la estimación inicial.
Este tipo de herramientas permiten optimizar las rutas de entrega y dar visibilidad en tiempo real del tráfico lo cual es clave para que los comercios puedan entregar alimentos frescos y mejorar la expectativa del cliente.
3. Visibilidad 360
“Nada genera más ansiedad en el cliente que no tener visibilidad completa de sus pedidos. Debemos tener la capacidad tecnológica para mostrarles paso a paso en qué etapa se encuentra su orden”, comenta el CEO de SimpliRoute. Las herramientas de inteligencia logística permiten esta funcionalidad, y son asequibles para cualquier tipo de negocio, independiente de su tamaño y facturación. Cabe destacar que estas tecnologías permiten reducir los costos logísticos hasta en un 34%.
Finalmente, pero no menos importante, la startup de optimización logística recomienda a los restaurantes y comercios dedicados a la entrega de alimentos vía delivery gestionar sus pedidos con plataformas que les permitan cierta autonomía respecto de su operación. Esto debido a que personaliza la experiencia con los clientes y permite recabar información relevante de su operación para la futura toma de decisiones; además, evita el pago de comisiones por un soporte operacional a otras empresas.