Telepeaje en México: ¿Por qué seguimos frenando donde otros países avanzan sin detenerse?

En países como Estados Unidos, Chile o España, los vehículos —incluidos los de carga— pasan por autopistas sin tener que detenerse en casetas. Todo funciona con sistemas de telepeaje fluido, también conocidos como free flow, donde los TAGs y cámaras de alta tecnología hacen todo el trabajo. ¿Y en México? Seguimos obligando a los transportistas a frenar, hacer fila y perder tiempo.
¿La razón? No es falta de tecnología. Es una combinación de descoordinación, rezago y falta de voluntad política.
🚧 Sistemas fragmentados y sin homologación
En México, las autopistas de cuota están operadas por distintas concesionarias privadas y públicas. Aunque todas deberían aceptar TAGs interoperables, la realidad es que no todos los lectores funcionan igual, y las fallas de lectura o rechazo de TAGs son comunes. Esto obliga al conductor a reducir la velocidad casi hasta detenerse para que el sistema lo reconozca… si es que lo hace.
🔧 Tecnología vieja, sin mantenimiento
Mientras en otros países los arcos detectan placas y TAGs a alta velocidad, aquí muchos lectores dependen de una alineación precisa y cercana al punto de cobro. No hay inversión constante en mantenimiento, y eso genera errores, cobros dobles y un aumento en los tiempos de cruce, especialmente crítico para el transporte de carga.
🏛️ Falta de una política nacional clara
No existe una estrategia nacional que obligue a todos los operadores a modernizar sus sistemas. La Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) ha intentado impulsar la interoperabilidad, pero sin una normativa fuerte, muchos concesionarios simplemente no invierten. Si no hay incentivos ni presión, el modelo de caseta con barrera sigue predominando.
🕒 Para el transportista, el tiempo perdido es dinero perdido
En el día a día, esto representa horas hombre perdidas, consumo extra de combustible y más exposición a riesgos, especialmente en zonas vulnerables. Un tractocamión puede perder hasta 20 minutos diarios solo en casetas. Si lo multiplicas por una flota de 50 unidades trabajando 6 días a la semana, el impacto es enorme.
¿Qué necesitamos?
- Un sistema de telepeaje nacional fluido, sin barreras físicas.
- Un solo TAG, una sola red, una sola plataforma de cobro.
- Inversión en arcos de detección, cámaras de reconocimiento de placas y sistemas 100% digitales.
- Una legislación clara que exija la modernización tecnológica de todas las concesionarias.
- Y lo más importante: una visión logística de largo plazo.