Medirán bombas de despachadores de gasolineras para evitar compra a Huachicoleros
El procurador fiscal de la Secretaría de Hacienda, Max Alberto Diener, aseguró al Senado que la reforma para frenar desde el control fiscal el robo de hidrocarburos permitirá al país combatir el huachicoleo de forma “mucho más contundente” y revisar la cantidad de gasolina que se vende, con mecanismos de medición que se colocarán incluso en las bombas del despachador de la gasolinería, sin dejar de combatirlo en tierra.
Se cruzará la información del volumen de combustible recibido y vendido al usuario, junto con los comprobantes fiscales, precisó el funcionario de la Secretaría de Hacienda, quien recordó que si bien ya existen disposiciones como el comprobante fiscal para los despachadores en gasolinerías, no es obligatorio; la reforma ahora busca precisamente que sea obligatorio.
Precisó que la minuta de la Cámara de Diputados “plantea mejorar el control volumétrico y controles preventivos del robo de hidrocarburos; para ello se contará con un nuevo software y podrán tener la certificación y verificación por terceros autorizados por el SAT, con controles muy rigurosos.
“Para las medidas el control volumétrico se va a dar, incluso, en las pistolas del despachador y se verificará contra los certificados digitales fiscales, aquí se cruzará la información del volumen contra el ingreso de lo que se cobra por la venta, en la parte fiscal y la parte volumétrica. Lo que vendió Pemex contra lo que está vendiendo una estación, lo que sale del despachador contra lo que está en el comprobante fiscal”, detalló.
Entre las medidas de control, dijo, se establece una serie de controles que podrá realizar el Sistema de Administración Tributaria (SAT) y la obligación de emitir certificados digitales de todas las ventas, inclusive cuando el cliente no pide el recibo, se va a emitir a través de tickets fiscales.
Así no habrá forma de evadir lo que se está despachando y lo que se ingresa, así se pretende cerrar que en las estaciones se venda combustible que no se adquiere a Pemex o que es de otra procedencia, comentó.
Y debido a que México importa el 70 por ciento de las gasolinas que consume, en la Ley Aduanera se reduce el tiempo de almacenamiento en aduanas, será sólo de
15 días.
Durante la reunión de información que realiza Hacienda, el SAT y los senadores, los legisladores federales expresaron sus preocupaciones, incluso el secretario de la Comisión de Hacienda, Jorge Luis Lavalle, entregó su propuesta de modificación para la exposición de motivos, a fin de evitar excesos de la autoridad que puedan perjudicar a otras empresas.
Max Alberto Diener, quien omitió cuantificar las pérdidas por el robo de hidrocarburos, informó que en 2015 se registraron cinco mil 252 tomas clandestinas y en el 2017 el número ascendió a nueve mil; de ahí la importancia de esta reforma.
Respecto a los temas de preocupación, explicó que la redacción de los artículos deja en claro que se trata de controlar la venta ilegal de combustibles y cerrar el paso a las trampas de quienes inventan pérdidas para alterar su contabilidad y así evadir el pago de impuestos y no reportar la compra y venta real de combustibles.
El perredista Isidro Pedraza, secretario de la Comisión de Hacienda, expresó el respaldo de su fuerza política, mientra que el presidente de la Comisión de Hacienda, Manuel Cavazos, informó que la tarde de hoy se reunirán para discutir el dictamen, con los cambios propuestos por el panista Jorge Luis Lavalle en la exposición de motivos y aprobarlo a la brevedad.
Los focos rojos toman medidas
Puebla y Tamaulipas son dos de los estados con más tomas clandestinas en los ductos de Pemex, en ellas las autoridades han incautado millones de pesos en combustible robado, además se han cerrado gasolinerías que lo distribuían.
En mayo de 2017, Puebla incrementó las acciones contra los huachicoleros, tras un enfrentamiento que delincuentes sostuvieron con militares en Palmar de Bravo.
Desde entonces, y hasta febrero, se han decomisado 6.4 millones de litros robados que habrían significado ganancias de 80 millones de pesos.
En Tamaulipas, de acuerdo con información del Grupo de Coordinación, durante los primeros 11 meses del 2017 fueron clausuradas 12 estaciones de servicio que facilitaban la venta de gasolina robada, y que además abastecían a vehículos utilizados por grupos criminales.