Édgar Martínez: el reto de convertir una empresa familiar en una compañía institucional

El año 1996 marcó el inicio de Édgar Martínez en el mundo del autotransporte y la logística, cuando un amigo lo invitó a colaborar en una línea de autobuses y así generar experiencia. No obstante, fue el conocido empresario Noé Paredes quien le externó una invitación para trabajar en su compañía, tan solo un año después de que Édgar arrancara su camino laboral; desde ese momento supo que lo suyo era el transporte de carga.

Noé fue fundamental en su desarrollo, ambos empezaron a diversificar la empresa que en ese momento se llamaba Transpac y que con el paso de los años se convertiría en Corporativo Unne. “Empezamos a ampliar oficinas y a generar mayor modalidad de cajas”, señala Édgar. Posteriormente Noé hizo un acuerdo de intercambio comercial con la empresa americana Schneider National y ahí Édgar se empapó al 100% en la manera en que se trabaja la logística y el transporte en Estados Unidos para posteriormente tropicalizarlo a México, además de tener un mayor conocimiento del sector de la caja seca.

Su formación profesional también ayudó, Édgar estudió Administración de Empresas, y posteriormente curso la carrera de Finanzas, eso le ayudó a relacionar el aprendizaje académico con las operaciones logísticas. Tras pasar por otras empresas de transporte en el sureste del país y retornar con Noé para laborar con él por 10 años más, nuestro entrevistado fue descubriendo la complejidad de transportar petroquímicos, productos que no conocía y que poco a poco fue entendiendo su operación. Sin saberlo, estaba forjando su camino para la aventura más importante de su vida.

Édgar Martínez, el hombre detrás de Transportes Hernie

Transportes Hernie se fundó en 1989 por Don Aurelio Hernández Arriaga, un hombre oriundo de Irapuato, Guanajuato que desde toda la vida se involucró en el traslado de combustibles, principalmente combustóleo y asfalto, así como en su comercialización. El origen del nombre surge de la composición de los apellidos de la familia: Hernández-Nieto, fundadores de la empresa.

“El 2021 fue un punto de inflexión, a principios de ese año me incorporé de tiempo completo a Transportes Hernie, a dirigirla y afortunadamente nos ha ido bien” señala Martínez, quien previo a su nombramiento fungía como asesor de la compañía con sede en Guanajuato. A partir de ese momento, ha tratado junto con su equipo de consolidar procesos, aunque su mayor reto ha sido transformar una compañía familiar en una empresa institucional, con objetivos claros como una mayor organización en cada una de las áreas, que los socios participen de su labor como accionistas, y que se sigan los lineamientos y estrategias preestablecidos.

Cuando Édgar tomó las riendas de la compañía había 40 unidades de carga, hoy son 85, todas en autotanques. Los camiones trasladan gasolina, diésel, combustóleo y asfalto. La empresa de transporte posee una planta donde se procesa el asfalto para hacer las emulsiones que se emplean en la construcción de carreteras y estacionamientos. Desde su perspectiva, la clave para llevar lo anterior a buen puerto es que han consolidado un buen equipo, tanto con la parte operativa como con los socios, bajo una disciplina que se ve reflejada en cada una de las áreas.

Las claves han sido cuidar la tesorería en el sentido de gastar e invertir lo que se tiene, además de que los socios no se involucran en la operación del día a día, ya que delimitan su labor como accionistas. A la par, Édgar y su equipo establecieron un plan de negocios de aquí a 5 años donde fjaron la estrategia y planes de crecimiento para seguirlos al pie de la letra, obviamente con los ajustes que deben existir en el inter, es decir dando resultados y por otro lado los socios respaldando las decisiones que van tomando.

“No son secretos, los éxitos en los negocios y en la vida llegan cuando eres disciplinado, haces un plan de negocio, eres constante y cada quien asume su rol”. Édgar también señala la importancia en invertir en unidades nuevas, en el caso de Hernie utilizan tractores marca Kenworth, y a las cuales se les programan periodos de mantenimiento para que puedan circular de la mejor manera.

“Los operadores en México están mejor calificados que los de Estados Unidos”

El Director General de Transportes Hernie señala que una de las mayores dificultades para el autotransporte son las regulaciones gubernamentales, hay demasiados permisos que se deben sacar, y máxime en el traslado de material peligroso y la comercialización de asfaltos y emulsiones. Otro obstáculo más que obvio es la inseguridad, cuyos índices se han incrementado de manera alarmante durante los últimos años, principalmente en la zona de San Martín Texmelucan en Puebla, y en otras áreas como los límites de Jalisco, Michoacán y Guanajuato.

“Anteriormente nos robaban, pero no agredían a los operadores, hoy en día lamentablemente los llegan hasta matar o balacear, es una agresión desmedida que actualmente estamos viviendo en el sector”, indica. Otro factor que pocos tomen en cuenta pero también afecta a los empresarios del sector es la incertidumbre política en la actualidad, además del incremento en los gastos operativos, aunque Édgar deja claro que las distintas herramientas tecnológicas permiten mitigar estas cuestiones, o al menos acoplarlos a los costos particulares.

Por último, Édgar identifica el problema de la gran rotación de operadores que hoy existe dentro de las empresas, ya que la mayoría no dura mucho tiempo en una compañía, no obstante, ve mejor calificados a los operadores en México que a los de Estados Unidos. “A parte de manejar, muchos están acostumbrados a justar sus frenos, a revisar su unidad, cosa que normalmente un operador en EU no hace, el conductor en México sí tiene buenas prácticas en ese aspecto”.