Covid-19 deja sin empleo a miles de operadores de carga en México

De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), más de 15.7 millones de adultos en México se han quedado sin empleo a causa de la pandemia por Covid-19.

Las empresas más vulnerables son las micro, pequeñas y medianas (PYMES), advirtió Enoch Castellanos, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (CANACINTRA) al afirmar que: “no hay empresa que pueda aguantar más de mes y medio si sus ventas caen de repente”.

En este sentido, el autotransporte de carga es uno de los más afectados, ya que de las más de 140,000 empresas transportistas registradas en el país, el 81.2% son hombre-camión (es decir micro y pequeñas compañías que poseen entre 1 y 5 camiones en su flotilla).

Según Juan Antonio García Fuentes, presidente de la Unión Fronteriza de Operadores, la pandemia ha provocado que más de 8,500 operadores estén desempleados. “Las bajas de personal continúan sin ser recuperadas”, aseguró García a Forte Noticias.

Las cifras corresponden tanto a transportistas que se mueven por el interior de la república como a los que cruzan la frontera hacia Estados Unidos.

Licencia vencida, una de las detonantes

Si bien la SCT ha reiterado una prórroga hasta diciembre para todas las licencias federales vencidas, la realidad es que a muchos operadores no se les permite seguir laborando si no poseen este documento en regla.

“Hay muchas empresas que no les permiten a los operadores del servicio federal entrar a sus instalaciones a cargar, debido a que tienen la licencia vencida”, afirmaron miembros de la Asociación Nacional de Representación en el Autotransporte, ANRA.

Lo mismo pasa para el caso de nuevas contrataciones. En un ejercicio hecho para esta nota a través de la página de empleo: “Computrabajo.com.mx”, se constató que todas las vacantes para operador de carga establecen que el aspirante debe tener la licencia federal vigente para poder ser contratado.

Empresas de transporte, al borde de la bancarrota

La continuidad en el pago de sueldos, el sostenimiento de los activos productivos, el encarecimiento de los seguros y el incremento de robo de unidades, provocaron un duro golpe a las finanzas de las empresas de transporte, comprometiendo su flujo de efectivo y la conservación de empleos.

“El problema para las empresas de autotransporte es la liquidez, muchas están al borde de la bancarrota, y se espera que las dificultades financieras continúen al menos hasta 2022. Además, tendrán una disminución en la facturación de más del 20%”, indica Umberto de Pretto, Secretario General de IRU.

Según especialistas, las grandes empresas tenderán a subsistir, además de aquellas que transportan insumos básicos como alimentos o medicinas, a diferencia de las micro y pequeñas que, al detener sus operaciones, han visto imposible conservar los puestos de trabajo en su totalidad.

“Nosotros le apostamos a defender el empleo, a garantizar el bienestar de todos, porque cuando esto regrese a la normalidad su compromiso nos permitirá volver a hacer grandes cosas”, explicó Jorge Alberto Casares López, director general de Alianza Trayecto, la cual abarca 9 empresas y 5,950 colaboradores.

Si bien los hombres-camión son dueños de los medios de producción, carecen de poder de apropiación del excedente productivo y no tienen control sobre sus condiciones inmediatas de trabajo.

“Cuando se inicie la actividad, toda empresa de transporte debe tomar en cuenta muy claro cuál va a ser el capital de trabajo que requiere para nuevamente generar carteras, los servicios que se requieren y los insumos necesarios”, refirió Enrique González, presidente de CANACAR.

Por esta razón, el plazo y la modalidad de pago de los créditos y las obligaciones postergadas son cruciales para que las empresas sigan operando.

Sabías que…

Según un informe de la Organización Internacional del Trabajo, OIT, los servicios de transporte en general están en riesgo, ya que dependen del dinamismo del sector privado el cual decrecerá en más del 6% en México. En este escenario, lo más probable es que 500 mil empleos se perderán.