Cae transporte marítimo mundial
El transporte de mercancías por vía marítima superó las 10 mil millones de toneladas por primera vez desde 2015, un 2,1 por ciento de alza comparado con los 9.800 millones de toneladas alcanzadas el año anterior, según revela el informe de transporte marítimo UNCTAD Review of Maritime Transport 2016, que destaca que este es el ritmo de crecimiento más lento de la industria desde 2009.
El futuro se mantiene incierto ante este panorama, resalta el informe. El transporte marítimo movilizó más del 80% de la mercadería a nivel mundial en 2015, y su lento crecimiento refleja un deslucido intercambio comercial, aunque hay excepciones en diferentes sectores.
Altos y bajos
El transporte de petróleo marcó su mejor desempeño desde 2008, gracias a los bajos precios, amplia oferta y estable demanda. Sin embargo, el crecimiento general del transporte marítimo se vio afectado por el crecimiento limitado del intercambio comercial de los graneles secos, específicamente carbón, mineral de hierro y el bajo desempeño del transporte de contenedores, que transporta cerca del 95 por ciento de los productos manufacturados a nivel global.
A pesar de este lento crecimiento, la capacidad de la industria continuó aumentando, marcando un alza de 3,5% a 1.800 millones de toneladas en 2015, lo que causó la caída estrepitosa de las tarifas de fletes a bajas históricas. En septiembre de 2016, el mercado de contenedores sufrió su peor bancarrota con la pérdida de Hanjin Shipping, la séptima naviera a nivel mundial.
Círculo vicioso
Los expertos no tardaron en notar al gran culpable de esta crisis: la sobreoferta de capacidad. La baja cantidad de carga disponible acentúa la redundancia de las grandes naves, lujos innecesarios en tiempos de escacez.
Además, la decreciente demanda China, bajos precios de commodities e inestabilidad política en algunos de los países productos de crudo y gas suman tensión a la situación actual, presentando potenciales riesgos negativos.
Las navieras han buscado reducir costos operacionales adquiriendo naves más grandes, pero pareciera que las buenas intenciones detrás de esta iniciativa están produciendo más problemas que soluciones, especialmente en países en vías de desarrollo donde los costos de transporte son considerablemente más altos que en otras regiones. Con embarcaciones de mayor envergadura todos los costos del sistema aumentan, con lo que países con mercados de menor tamaño quedan enfrentados a mercados oligopólicos.
Desarrollo estancado
Los países en vías de desarrollo fueron responsables de cerca de un 60% del volumen de carga mundial en 2015. Con la excepción de algunos países como China, la mayoría de los países en desarrollo carecen de la infraestructura portuaria para atender grandes embarcaciones. Por lo que, a menos que destinen un cuantioso presupuesto para modernizar sus puertos, los países en desarrollo se verán afectados por un menor tránsito de naves, lo que los convertirá en puertos menos competitivos y más costosos.
Sin embargo, el reporte presenta una luz de esperanza en este incierto panorama. Gracias al desarrollo de obras de ampliación en el Canal de Panamá y Canal de Suez, sumado al crecimiento de la población, las expectativas de largo plazo se mantienen optimistas, siempre y cuando los países en desarrollo logren identificar ventajas comparativas en áreas como construcción de naves, registros y personal, para beneficiarse de ellos.
Competitividad portuaria
Mantener las condiciones competitivas de los puertos es la clave, indica el reporte, no solo para sobrevivir la crisis, sino para salir airoso de ella. La eficiencia en el sistema portuario es fundamental para mantener la competitividad, junto con mejorar el desempeño a través de entrenamientos de administración, proyectos de investigación y mantenerse al día respecto de las últimas legislaciones.
Será tarea de las industrias locales tomar en consideración las sugerencias para un mejor futuro, el negocio internacional necesita el aporte de todos.
Por MundoMaritimo