Zonas Económicas Especiales: existen más dudas que certezas
Históricamente la creación de las Zonas Económicas Especiales (ZEE) en el mundo ha contribuido con el desarrollo económico de una región y de un país.
Según expertos en economía mundial, el ingreso per cápita de las familias que viven en las inmediaciones de esos puntos importantes se ha visto fortalecido y con ello también mejorado sus condiciones de vida.
La estrategia política y económica que toma un gobierno, donde existe una ZEE, siempre reporta resultados palpables y los países asiáticos han sido el ejemplo claro, destacan los especialistas.
Para conocer un poco más sobre los objetivos, alcances y realidad sobre este tipo de estrategia económica de la cual Chiapas intenta incursionar, NOTICIAS, Voz e Imagen buscó la opinión del economista y académico Víctor Gonzáles Noo, quien lleva más de tres años investigando sobre este fenómeno económico.
ES UN ENORME RETO
Bajo su percepción, la ZEE que el Gobierno Federal pretende instalar en Puerto Chiapas representa un enorme reto, pues no sólo se trata de lo que las autoridades han recitado por más de un año: tener un régimen político económico y fiscal diferente al interior del país, lo cual significa dar facilidades fiscales a las empresas que se establezcan en esos lugares.
Se trata también de superar las problemáticas políticas sociales que prevalecen en la entidad y que han sido el factor principal de inestabilidad, llámese paros magisteriales, bloqueos carreteros, manifestaciones de organizaciones campesinas.
—¿Realmente están dadas esas condiciones en Chiapas para que se detone la ZEE?
—El objetivo de una Zona Económica Especial es hacer crecer la región. En la historia del país siempre ha existido dos México: La del Norte y la del Sur. La mayoría de las empresas se han asentado del Centro del país para en Norte.
Ahora con la creación de cuatro ZEE -Puerto Chiapas; Lázaro Cárdenas, Michoacán; Salina Cruz, Oaxaca y Coatzacoalcos, Veracruz- se quiere que la parte del Sur se potencialice. Se pretende atraer inversión extranjera directa, inversión nacional ofreciendo esas facilidades fiscales como la reducción de impuestos de IVA e ISR.
HAY QUE DAR CERTIDUMBRE
Pero también hay un factor que el gobierno estatal tiene mucho que ver para que se concrete el crecimiento de las empresas y el desarrollo de la región, es ahí donde existen ciertas incertidumbres.
Si yo soy un inversionista que va a llegar a la zona económica especial de Puerto Chiapas y voy a invertir, qué te gusta, unos 20 o 30 millones de pesos para hacer una fábrica y generar empleo, voy a cerciorarme que Puerto Chiapas tenga la capacidad para movilizar vía marítima la mercancía que produzco y a la vez que exista una buena infraestructura carretera para sacar también por esa vía.
Ahora, en el caso de sacar mis productos por la vía terrestre, qué garantía me da el gobierno sobre la calidad del complejo carretero o qué me dará a mí la certeza de que en el trayecto de la mercancía no se tope con movimientos sociales-políticos que bloquee la carretera.
Hoy en día hay una logística internacional que se denomina Just in Time, que quiere decir justo a tiempo; es un compromiso que se establecen a las empresas puntualidad en la entrega de las mercancías de lo contrario se aplican descuentos por impuntualidad.
Bajo ese criterio, cuestiona el especialista, qué garantías dará el gobierno estatal a los consorcios que se establecerán de garantizar que a medio camino no habrá un bloqueo carretero, conociendo que eso es lo que casi todos los días se presentan en Chiapas.
También, el gobierno ha vendido la idea de que Puerto Chiapas es un puerto de altura, podemos decir que eso no es un puerto de altura porque no es apto para cabotaje y mercancía; muy pocos barcos vienen al año, mientras el gobierno lo vende como si fuera realmente de crucero, siendo realistas, no lo es. No todos los turistas bajan y hay muy poca derrama por esa vía.
No se ve la gran actividad como otros puertos, entonces el reto para las autoridades es cómo motivar a que vengan las industrias y convertirlo en un puerto de altura.
—¿Entonces que se puede hacer para facilitar el libre tránsito de las mercancías?
Lo que se tiene que hacer es establecer de verdad el Estado de Derecho, el gobierno tendrá que ser más coercitivo y eso está complicado para cumplirse. También que las carreteras sean amplias y siempre estén en buen estado para que haya confianza en las empresas.
El proyecto de las Zonas Económicas Especiales, como tal, es muy bueno, pretende beneficiar a las empresas con la reducción del IVA y otros impuestos; pero la pregunta es si se cumplirá con los ofrecimientos que el gobierno haga con las grandes empresas.
—¿Entonces cuáles serían los riesgos?
—Al no generarse esas condiciones las inversiones podrían buscar irse a otras Zonas Económicas de otros estados e incluso de otro país.
Cuba ha empezado a buscar la manera también de generar sus Zonas Económicas Especiales, por su ubicación estratégica podría ganarle terreno a México, recordemos que Cuba tiene un bajo nivel de rezago educativo y un nivel educativo alto.
González Noo, quien imparte clases en la Escuela Bancaria Comercial, Campus Chiapas, refiere que actualmente en el mundo existen más de 3 mil 500 Zonas Económicas Especiales, pero donde se ha hecho evidenciar más el progreso y desarrollo es en China. Ellos empezaron con cuatro en la década de los ochentas, hoy en día tienen 316.
–Existen otros factores que le dan mayor incertidumbre a la instalación de las ZEE, ¿Cuáles serían esos otros factores?
–Ya hizo un año que se promulgó la Ley y se asignó un administrador general de las ZEE pero no se ha dado un gran avance como tal en cuanto la llegada de empresas, pareciera que todo se ha quedado en el discurso político. Técnicamente, no se sabe qué empresas vendrán y que le quieren apostar por venir a Chiapas.
Otro problema que no se le ha tomado mucho en cuenta es la migración que prevalece en la zona del Soconusco. La pregunta es ¿a quién se le vas a dar empleo, se le vas a dar empleo a los locales o también se va a tomar en cuenta a este sector de la población? Porque Chiapas tiene un programa con Guatemala que se llama Tarjeta de Visitante Regional y eso tendría una implicación ahí.
Se podría generar el mismo fenómeno que se dio en décadas pasadas en la zona norte del país con las grandes maquilas que se crearon, muchas personas que pretendían llegar a los Estados Unidos se quedaron a radicar ahí al ver que existía buenos ingresos.
HAY OTROS ASPECTOS A CONSIDERAR
El proyecto de las Zonas Económicas Especiales y la Ley como tal, asegura el economista, es muy bueno, pero no se han tomado todos esos aspectos económicos, políticos y sociales.
—¿Ante esos factores, deben considerarse opiniones de otros sectores para fortalecer el crecimiento de las ZEE, de Chiapas?
—Claro. Se ha insistido en la creación de un comité técnico consultivo, donde las instituciones privadas, públicas, de educación superior, las Cámaras de Comercio y todo lo que esté involucrada en la cuestión del comercio internacional, aporte sobre cómo debería funcionar en realidad la ZEE de Puerto Chiapas.
Otro punto importante que también debe considerar es que se debe designar a un administrador por Zona Económica Especial sobre todo que conozca la situación -ya sea económica, cultural, política o social- que prevalece en la zona, en especial de nuestro estado que tiene situaciones muy particulares, como bloqueos, fenómenos naturales y otras cuestiones.
Desde el Plano Académico, insiste el especialista, no se tiene conocimiento si realmente existe un plan de negocios para atraer la inversión extranjera, es decir, para vender al estado en el extranjero como un lugar y un nicho de negocios.
En la historia de las Zonas Económicas Especiales se ha visto que bajo una buena planeación y buenas políticas, éstas comienzan a mostrar sus resultados a los 15 años más o menos, ese tiempo le llevó a China y a la India para desarrollarse realmente, asegura.
—¿Alcanzará el tiempo para que se concrete en esta administración o será retomada por las siguientes administraciones?
—Uno de los problemas que tiene nuestro país es que no hay plan de nación de crecimiento a futuro o a largo plazo, a 50 años por ejemplo, que no importe que cada seis años sea el cambio de gobierno, pero que siga ese plan. Lo lamentable es que cada seis años se modifican o se eliminan los proyectos por eso no se genera un verdadero crecimiento económico.
Fuente NV