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Lo que debes saber sobre inflado y rotación de las llantas

Existen numerosos mitos en torno a que las llantas pueden llevar a prácticas de mantenimiento incorrectas o decisiones de compra poco informadas, lo que puede afectar la seguridad en las carreteras y la eficiencia del vehículo.

1. CAMBIAR EL TAMAÑO DEL NEUMÁTICO O EL RIN AFECTA EL RENDIMIENTO DEL AUTO

Cierto. La estructura de tu vehículo tiene una razón de ser y cada uno de sus elementos también. Intentar usarlo con neumáticos o rines de una medida diferente a la original afectan de inmediato sus respectivas funciones, de este modo, perjudican el buen desempeño de tu vehículo. 

2. INFLAR LAS LLANTAS AL MÁXIMO ES MEJOR

Falso. Un neumático con más o menos aire del requerido puede ocasionar muchos accidentes, las llantas cuentan con un indicador que señala la presión máxima de inflado que pueden soportar. Sin embargo, la presión de inflado adecuada para cada vehículo es determinada por el fabricante del equipo original y generalmente se encuentra especificada en una etiqueta dentro del vehículo.

Seguramente te has preguntado también cómo o cuándo inflar llantas en la estación de servicio. A este mito, debemos agregar aquel que dicta que si vas a recorrer algún lugar con clima cálido debes aumentar la presión en las llantas, lo cual es innecesario, ya que este tipo de variaciones de presión por temperatura ya han sido contempladas desde el diseño, por lo tanto, solo deberás preocuparte por inflarlos correctamente cuando estén “fríos”. 

3. DEBES ROTAR LA LLANTAS PERIÓDICAMENTE

Cierto. El desgaste de los neumáticos depende del tipo de tracción del vehículo y del eje en el que se encuentren ubicados. Entonces para que el desgaste sea uniforme, se recomienda pasar las cubiertas delanteras para atrás y las de atrás para adelante, y procurar que giren hacia el mismo lado donde giraban anteriormente.

4. LAS LLANTAS SÓLO DEBEN CAMBIARSE CUANDO ESTÁN COMPLETAMENTE DESGASTADOS

Falso. La banda de rodadura es crucial para garantizar el control y el agarre en todo tipo de clima, así que esperar a que el neumático esté completamente desgastado puede ser peligroso. Se recomienda reemplazar las llantas cuando la profundidad de la banda de rodadura alcanza los 2/32 de pulgada (aproximadamente 1.6 mm) para asegurar un rendimiento óptimo en condiciones de lluvia, mojado e incluso seco.

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