
Una startup con sede en California, Revoy, está revolucionando el transporte de carga pesada con el lanzamiento de una dolly eléctrica que convierte tractocamiones diésel en híbridos de forma rápida y sin necesidad de modificar el vehículo.
Tecnología práctica y accesible
Este sistema se acopla entre el camión y el remolque, y funciona como una unidad de propulsión adicional. Su batería de 575 kWh y motor propio permiten reducir el consumo de diésel y las emisiones contaminantes, al tiempo que mantienen la capacidad de carga y la operación original del vehículo.
El dispositivo no solo impulsa el camión, sino que también agrega funciones inteligentes de seguridad, como asistencia en reversa, control de estabilidad en viento cruzado, monitoreo de puntos ciegos y frenado regenerativo.
Operación sin interrupciones
Una de las características más destacadas es su sistema de intercambio rápido: cuando se agota la carga, la dolly se sustituye por otra completamente cargada en menos de cinco minutos, permitiendo que la operación continúe sin necesidad de largos tiempos de espera por recarga eléctrica.
Actualmente, este servicio opera en algunos estados de EE. UU., como Texas y Arkansas, y se espera una expansión progresiva.
Modelo de negocio flexible
Revoy no vende las dollies, sino que las ofrece bajo un modelo de cobro por milla recorrida, eliminando la necesidad de una inversión inicial. Según estimaciones de la empresa, los transportistas podrían ahorrar más de $5,000 dólares anuales por unidad gracias a la reducción en combustible y mantenimiento.