Ford echa el freno a su estrategia de autos eléctricos: ¿giro estratégico o retroceso estructural?

Detroit / 15 de diciembre de 2025 — El legendario fabricante de automóviles Ford Motor Company anunció un cambio radical en su hoja de ruta tecnológica: la compañía estadounidense dará por terminado el desarrollo de varios modelos eléctricos de gran tamaño, asumirá un cargo extraordinario de 19 500 millones de dólares y reorientará su enfoque hacia vehículos híbridos, de gasolina e híbridos de autonomía extendida (EREV). Esta decisión marca uno de los replanteamientos más significativos de la industria automotriz en años recientes, en gran medida influido por cambios regulatorios y de mercado en Estados Unidos.
🔌 De electromovilidad ambiciosa a estrategia pragmática
Ford había invertido cientos de miles de millones de dólares en electrificación en la última década, alineándose con la tendencia global hacia emisiones cero. Su pick-up F-150 Lightning se presentó como uno de los modelos eléctricos más ambiciosos del mercado norteamericano. Sin embargo, la compañía anunció que detendrá la producción de la versión totalmente eléctrica del F-150 Lightning, que pasará a una nueva arquitectura híbrida (EREV) en su próxima generación. También cancelará el desarrollo del camion eléctrico de próxima generación conocido como T3 y varias furgonetas comerciales planificadas como vehículos eléctricos puros.
El impacto de esta reestructuración no es menor: aproximadamente 8 500 millones de dólares del cargo extraordinario están directamente relacionados con la cancelación de programas de vehículos eléctricos diseñados pero no lanzados. Otros 6 000 millones están vinculados a la disolución de una empresa conjunta con el productor de baterías SK On, y 5 000 millones a costos asociados a programas cancelados o replanteados.
⚠️ ¿Por qué este cambio? Mercado y política en juego
Dos factores —mercado y política— convergen en este momento crítico para Ford:
- Políticas federales en EE. UU.: La administración del presidente Donald Trump eliminó el crédito fiscal federal de hasta 7 500 dólares para compradores de vehículos eléctricos y suavizó las normas de emisiones que obligaban a los fabricantes a acelerar sus programas de electrificación. Esto ha debilitado considerablemente el mercado de autos eléctricos —las ventas en EE. UU. cayeron cerca del 40 % en noviembre, tras la expiración de ese incentivo—, lo que ha hecho que producir eléctricos masivos sea menos rentable sin apoyo fiscal estatal.
- Demanda de consumidores: El mercado norteamericano muestra una preferencia persistente por camionetas, SUVs y vehículos con autonomía y redes de carga aún en desarrollo, lo que ha limitado la adopción de eléctricos puros pese a las expectativas previas.
El director de operaciones de Ford declaró que, “en lugar de gastar miles de millones más en vehículos eléctricos de gran tamaño que ahora no tienen un camino claro hacia la rentabilidad, estamos destinando ese dinero a áreas que generan mayores retornos”.
🚗 Hacia una mezcla tecnológica más heterogénea
Aunque Ford reduce drásticamente su programa de autos puramente eléctricos, la empresa no abandona por completo la electromovilidad. Su objetivo a 2030 es que híbridos, vehículos eléctricos de autonomía extendida y eléctricos puros representen el 50 % de su volumen global, frente al 17 % actual. Esto se logrará combinando tecnologías, incluyendo modelos más asequibles que podrían salir al mercado alrededor de 2027 con precios cercanos a los 30 000 dólares.
El F-150 Lightning, símbolo de la electrificación de pickups, será reemplazado por una versión extend-range con motor de gasolina que recarga la batería, lo que le permite rangos mayores y mayor flexibilidad operativa —una configuración híbrida que combina rendimiento con alcance y autonomía.
🧩 Impactos sectoriales y perspectivas
El replanteamiento de Ford es el reflejo de una industria en transición: varios fabricantes tradicionales están ajustando sus estrategias EV tras años de sobreinversión y expectativas de crecimiento que no se materializaron al ritmo esperado. Además, otras marcas automotrices están pivotando hacia híbridos o modelos más rentables en segmentos de consumidores con presupuestos y hábitos de compra conservadores.
Para el sector del transporte y la logística, este cambio sugiere que la electrificación no será lineal ni uniforme: la infraestructura de cargas, disponibilidad de modelos comerciales eléctricos y la demanda real de flotas determinarán si los vehículos cero emisiones se consolidan rápidamente o si la industria transitará por etapas híbridas y de autonomía extendida antes de una adopción total.





