Ferrocarrileros pierden, Autotransportistas Ganan
Por primera vez en nueve años, las empresas que prestan el servicio de transportación por tren en México, Ferromex y Kansas City Southern (KCSM), principalmente, dejaron de obtener ingresos de 3 mil 200 millones de pesos en 2015 y la expectativa es que al finalizar el presente año el monto crezca a cerca de 4 mil millones, debido a que sus clientes bajaron carga de los vagones por la inseguridad.
En el 2015, el volumen de mercancías movilizadas por ferrocarril en el país se redujo 25.8 por ciento, al situarse en las 46 millones 616 mil toneladas, según datos de la Dirección General de Transporte Ferroviario y Multimodal, dependiente de la SCT. Esta contracción en el transporte ferroviario local no se veía desde 2007.
El volumen de carga representó para las ferroviarias el dejar de facturar más de 3 mil 200 millones de pesos el año pasado, de acuerdo con un cálculo de EL FINANCIERO basado en datos de las empresas y la SCT.
Los expertos consideraron que este problema crecerá en 2016, cuando los ferrocarriles movilizarán 41 millones 689 mil toneladas en el mercado interno, 11 menos que en 2015. Esto implicará que las empresas dejen de obtener ingresos por 3 mil 800 millones de pesos.
“Nosotros tuvimos 24 incidentes por día en septiembre relacionados con inseguridad, nos hemos reunido con la policía federal, el ejército, policías estatales, y gobierno. En octubre esto ha disminuido y esperamos que en el segundo trimestre se normalice”, dijo Alfredo Casar, presidente de Ferromex en conferencia con analistas.
Según datos de la propia firma, en 2013 el promedio diario de incidentes fue de 3.4.
Recientemente, las entidades que han presentado la mayor incidencia son Querétaro, Guanajuato y Aguascalientes, las cuales registran incrementos considerables.
El robo a los trenes en México ha ido en aumento, principalmente en el Bajío. Según iniciativas elaboradas por diputados y las recientes manifestaciones de los ferroviarios, actualmente se cometen 25 robos en promedio diario, aunque no todos son denunciados ante las autoridades.
Rogelio Vélez, CEO de Ferromex, explicó en julio pasado que los asaltantes, a los cuales les pagan entre 500 y 600 pesos, se suben en los cruces urbanos, cierran las válvulas de los frenos y obligan a que se detenga el ferrocarril, momento en donde las bandas aprovechan para robar mercancía.
Detener un tren hace que toda la cadena se frene para evitar accidentes, lo que implica que alrededor de 20 vehículos se paren diariamente, agregó el ejecutivo.
“Ha habido un factor que ha incidido en el transporte ferroviario últimamente, los bloqueos a la vías del ferrocarril, al crear cierta inquietud en los usuarios, más para los que tienen que mover mercancías en distancias medianas o cortas, a lo mejor ellos han decidido irse por el autotransporte”, expuso José Zozaya, presidente de Kansas City Southern México (KCSM).
El informe de la estadounidense FreightWatch detalla que el 27 por ciento de los robos corresponde a alimentos y bebidas, el 11 por ciento son de insumos relacionados con la construcción y productos industriales, y otro 11 por ciento de combustibles.
En cemento transportado donde participan firmas como Cemex, se observó una contracción de 1.5 por ciento en 2015, siendo un insumo que representa el 8.3 por ciento de la carca total. El combustóleo de Pemex, que significa el 1.7 por ciento de la carga, tuvo una caída 37 por ciento el año pasado.
GANA AUTOTRANSPORTE
El negocio que han dejado las ferroviarias por la inseguridad lo han retomando autotransportistas.
“La inseguridad en el tren es diferente, al ser una vía, las mercancías se quedan detenidas y son robadas, en el autotransporte hay varios caminos, hay opciones para los usuarios, sin embargo, la falta de desarrollo del ferrocarril y la inseguridad hacen que esa carga transportada se pase a las carreteras, siendo el autotransporte ganador de este mercado”, señaló Enrique González, delegado de la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga en el Bajío.
El sector ferroviario es considerado como el más eficiente para los grandes volúmenes y distancias en tierra, ya que reduce los costos de transportación de las empresas si se compara con el transporte por camión. “Al dejar de usarse puede aumentar los costos de las empresas y ese encarecimiento se puede transferir a los productos”, agregó José Luis Fuente, presidente de la comisión de transporte de la Concamin.
“En México se han incrementado los índices de seguridad en algunas zonas, creemos que por el atractivo que se vuelve a tener junta a toda la industria automotriz y máxime si México es productor de automóviles para muchos países del mundo”, lamentó Zozaya.
Fuente El Financiero