El robo a transporte de carga en México pone en riego cadenas de suministro y atrae vigilancia del T‑MEC

Grandes empresas de Estados Unidos lanzaron una advertencia formal: el robo masivo al transporte de carga en carreteras mexicanas está generando costos adicionales, riesgos para la inversión y amenaza con dañar la competitividad de la logística entre México y Norteamérica.
Detalles de la alerta
- National Foreign Trade Council (NFTC), que agrupa a más de 300 empresas norteamericanas —incluyendo gigantes del transporte, tecnología y consumo— presentó un escrito ante la Office of the United States Trade Representative (USTR) señalando que los robos en carreteras mexicanas impactan tanto a exportadores como a importadores de ese país.
- El argumento es que estos robos no sólo son incidentes aislados de transporte: interrumpen rutas, elevan primas de seguro, encarecen logística y podrían mermar la ventaja de integración industrial México–EE.UU. En el marco de la próxima revisión del T-MEC, estas firmas exigen que se aborde el tema dentro del capítulo de facilitación del comercio. (El Financiero)
- Las empresas piden que México implemente medidas concretas de seguridad carretera: mayor vigilancia, protocolos de protección para transporte de mercancía, interoperabilidad de datos entre estados y homologación de mecanismos de rastreo. (elnorte.com)
¿Por qué es relevante para el autotransporte en México?
- Para las empresas mexicanas del autotransporte de carga, el mensaje de sus contrapartes estadounidenses es claro: si no se reduce la pérdida de carga y la inseguridad en rutas, las cadenas logísticas podrían buscar alternativas menos riesgosas, lo que implicaría menor volumen o mayor costo por unidad transportada.
- La presión para que México mejore la seguridad carretera puede traducirse en nuevas regulaciones, exigencias de rastreo, seguros más caros o incluso auditorías conjuntas transfronterizas. Las flotas que no estén preparadas podrían quedar fuera de ciertas cadenas de valor.
- Si el robo de mercancía o unidades incrementa los costos operativos (seguros, recargos, pérdidas) y esos se trasladan a tarifas, las pequeñas y medianas empresas transportistas corren el riesgo de perder competitividad frente a flotas internacionales o rutas alternativas.
Riesgos y señales de alerta
- La falta de acción o la lentitud en la implementación de medidas podría generar que, en la revisión del T-MEC en 2026, EE.UU. exija compromisos vinculantes sobre seguridad carretera como condición para mantener privilegios comerciales.
- Operadores que trabajan con carga internacional o rutas binacionales deben revisar su cadena de custodia, seguros, rutas y protocolos de emergencia. Ignorar el mensaje puede implicar quedar fuera de carga exportadora.
- Ante la presión internacional, también podría haber mayor supervisión de autoridades mexicanas o auditorías a concesionarias y operadores, lo cual puede aumentar la carga administrativa —un coste más para el transportista.
Este llamado de atención internacional no es un simple aviso: es un termómetro de la vulnerabilidad del sistema logístico mexicano. Para quienes están en el negocio del autotransporte y la logística en México esto significa que ya no basta con mover carga; hay que demostrar seguridad, trazabilidad, protocolos sólidos y rutas confiables. Quienes subestimen este desafío lo más probable es que se queden observando cómo la carga —y los clientes— se van por rutas menos problemáticas.



